
Mi contexto: cansancio acumulado y cara de alucinación al ver el magestuoso museo, El Museo (que así les gusta llamarlo a los de allí aunque tengan otro).
La obra: la exposición de Richard Serra "La materia del tiempo".
Los hechos: la aventura de pasar entre planchas de acero que pesan chorrocientas toneladas y no van ancladas ni al suelo, ni a la pared... ¡Aghhhhhhhhhhhhhhhhhhh! ¿Realmente esto es fruto de leyes físicas y otras leyes variadas o utilizan "No más clavos"???
Mis sensaciones: Desde la planta de arriba se ven las formas con un resultado espectacular. Al entrar en la exposición y pasar entre las planchas vas siendo presa de sensaciones muy interesantes: percibes sonidos que van cambiando a medida que caminas entre las planchas que cambian su forma, sientes claustrofobia y agobio, a la vez que tienes sensación de liberación cuando llegas a determinados puntos... La experiencia ha sido muy buena porque, en cierto modo, es algo desafiante.
Quizás es como la vida, si la miras de lejos (en el caso de la exposición desde arriba) es un espectáculo precioso, pero si "entras dentro", participas, está llena de sensaciones, buenas y malas...